lunes, 18 de marzo de 2013

El desarrollo y la educación

Dicen que las neuronas no empiezan a morir a partir de los 20 años y ustedes se preguntarán ¿por qué hoy empiezo a escribir con esta afirmación? pues hace sólo nueve días  cumplí mis 21 años, con lo cual, se supone que mis neuronas están en proceso de decadencia, pero NO!, esto es falso, las neuronas se reproducen a lo largo de la vida, incluso si una de las partes del cerebro comienza a fallar, las partes colindantes hacen la tarea que en un principio hacía ésta.


La memoria es muy importante a la hora de aprender y a lo largo de nuestra vida, pues gracias a ella hemos aprendido a caminar, a cepillarnos los dientes, a comer, etc…

Para poder desarrollar nuestro cerebro es imprescindible la interacción con el mundo social, tenemos un desarrollo orgánico que hace que nuestro cerebro vaya agrandándose a lo largo de nuestra vida, pero lo que está claro que solo con esta evolución orgánica no podríamos analizar todo lo que sucede en el mundo. Lo importante es como nosotros nos relacionamos con el entorno en el que estamos para llevar a cabo procesos de alto rendimiento.

Depende del contexto en el que nos encontremos y como nos relacionemos con el entorno, aprenderemos unas u otras cosas. Esto nos lleva a la idea de que para construir percepción y asignar significado a los estímulos que recibimos del medio, necesitamos interactuar con el medio físico y con el medio actual. Estamos hablando aquí de que somos sistemas abiertos y dependiendo de la persona y sus experiencias, se le puede dar un significado u otro a una misma situación. 


John Locke:
“Somos paneles de cera virgen y es la educación la que escribe sobre esos paneles de cera”





Quiero compartir con ustedes un vídeo, es un poco largo, dura unos 55 min, pero se lo recomiendo. Es la historia de Genie, "la niña salvaje", el caso de una niña a la que su padre privó de relacionarse con el entorno desde que nació.






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