lunes, 1 de abril de 2013


El 86% de los aspirantes a maestro suspende el examen de conocimientos generales


¿Cómo queda exactamente representada la educación de un país cuando en el titular de una noticia nos encontramos que el 86% de los aspirantes a profesores suspende el examen de conocimientos generales?


En el año 2011, los candidatos a las oposiciones de maestro, que tuvieron lugar en Madrid, obtuvieron unos resultados considerablemente pésimos, pues siendo estos quienes educarán a la sociedad en un futuro, no fueron capaces de contestar de forma correcta a preguntas de carácter general con un índice de dificultad realmente bajo.

Cuando Lucía Figar, consejera de educación del Partido Popular, afirma que no todos deben tener estos conocimientos pero si enseñarlos, deja completamente de lado que para poder enseñar, primero se ha de tener unos conocimientos previos de aquellos conceptos a impartir, pues no se puede enseñar algo que no se ha interiorizado anteriormente.

Por otro lado, una de las quejas que se ha recibido, ha sido que esta prueba de conocimiento se fijó con sólo cinco meses de antelación, además de ponerse en evidencia que esta poseía excesivo contenido. Es cierto que la cantidad de contenidos puede dificultar la memorización de este, pero lo que se critica aquí es que hubieron preguntas de una simplicidad muy alta que han sido contestadas de una forma incompresible, como por ejemplo, aquellas relacionadas con la clasificación de los animales o sumas y restas de tres cifras que, muchos de los profesores, no supieron contestar de forma correcta, además de una gran cantidad de faltas de ortografía cometidas en numerosas respuestas dadas por estos.

A pesar que en las encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas aparezca la labor de docente como la segunda profesión más valoradas del país, se podría decir que con la aparición de tales errores en estas pruebas y teniendo en cuenta que 3.800 de las personas que se presentaron a estas oposiciones y las suspendieron, han logrado conseguir un trabajo, y 336 aprobados se quedan sin plaza, llegará el momento en el que la verdadera educación del país y el aprendizaje, vaya en decadencia debido a la falta de conocimientos y preparación del profesorado. Por ello considero importante una nueva ponderación, aquella que le dé mayor importancia al resultado de las oposiciones, dejando en un segundo lugar las experiencias que una persona pueda haber tenido como docente.



A continuación os dejo el enlace de la noticia para que puedan leerla:

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